Impacto del APEC en el Perú
La incorporación del Perú al Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en 1998 ha generado un impacto positivo en el país, y un balance de ello es oportuno ahora que la capital peruana será sede de la 24ª Cumbre de Líderes. En una rápida evaluación, vemos que el comercio con las 21 economías que integran el bloque ha crecido 14 veces, lo cual representa un resultado de importancia para nuestra nación.
Este resultado ha generado un interesante efecto dominó que redunda en el progreso del país. Así tenemos que el vínculo con cada economía de la plataforma se ha fortalecido, sobre todo con la República Popular China, actualmente la economía más dinámica del planeta y de mayor crecimiento sostenido de los últimos cinco años, con la cual tenemos una asociación estratégica que ha permitido superar el intercambio comercial que antaño teníamos en mayor volumen con Estados Unidos.
Además, es vital el refuerzo de la imagen del Perú ante el APEC, en particular, y ante la comunidad extranjera, en general. Por ejemplo, ahora goza de un fortalecido perfil de socio comercial, y de confiable receptor de inversiones de mediano y largo plazo gracias a la estabilidad reflejada en sus indicadores económicos y el marco legal que brinda garantías a la inversión privada.
Sumemos a esas condiciones el gran atractivo turístico del Perú basado en su riqueza histórica, variedad cultural y su amplísima abundancia de paisajes naturales, factores suficientes para convertirlo en un destino preferido, ya sea para el turismo vivencial, gastronómico, ecológico, de avistamiento de aves, entre otros. Como muchos sectores económicos del Perú, el turismo está creciendo y su expansión depende de las mejoras que podamos ofrecer como anfitriones a los visitantes.
Con estos elementos, el éxito de la 24ª Cumbre APEC es más que seguro. Como sede del encuentro, el Perú muestra índices de crecimiento por encima del promedio regional, un ambiente favorable para las inversiones, y además goza de una evaluación positiva de las calificadoras de riesgo, lo cual configura un panorama inmejorable para tan importante cita. De esa manera, el encuentro, que se realizará los días 19 y 20 de noviembre, también será una excelente oportunidad para reforzar lazos con las economías de América Latina y así fomentar al más alto nivel la interconectividad de ambas costas del Pacífico.
No olvidemos que es la segunda vez que el Perú es elegido sede del foro, y para lograrlo se necesitó el consenso de las 21 economías que integran esta plataforma. Ninguna otra nación de este bloque ha sido anfitriona en dos oportunidades en tan corto plazo, por lo que su designación es un reconocimiento a la vocación peruana por incentivar el libre comercio en el mundo.
La presidencia peruana del APEC, sin duda, es un paso más para consolidar la política exterior de integración a la comunidad internacional, pero, sobre todo, servirá para promover más desarrollo y consolidar el progreso económico con la captación de nuevos capitales.
Es vital el refuerzo de la imagen del Perú ante el APEC, en particular, y ante la comunidad extranjera, en general. Por ejemplo, ahora goza de un fortalecido perfil de socio comercial.
Fuente: El Peruano